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domingo, 26 de marzo de 2023

París: entre protestas, recuerdos y novedades (y III)

Continuamos hasta plantarnos ante el infinitamente fotografiado Moulin Rouge, no sin antes pasar, en nuestro descenso, por otro molino típico del barrio que ejerce de techado de un restaurante. Y, desde aquí, seguimos en dirección hacia el Louvre. Hoy nos hemos puesto un doble objetivo de grandes clásicos parisinos.

Eso sí, no estamos dispuestos a renunciar a nuestros crepes. Lo logramos y con nota. Justo en la puerta principal del museo hay un carrito que dirige un hombre vestido de capitán de navío del siglo XVIII, con dos sables con los que repela la mantequilla.

Armado de un inagotable sentido del humor y con unos precios bastante económicos (cuatro euros la gallete de queso y jamón york y tres el crepe de nutella, que denomina Nutellix), nos permite disfrutar de un descubrimiento curioso para anotar en nuestro periplo y de una agradable elaboración para nuestro paladar.


Victoria de Samotracia


Perfecto para adentrarnos en el museo con nuestros tíques impresos y comprados para las 15 horas. Pasamos junto a la Victoria de Samotracia y nos dirigimos hacia la tantas veces fotografiada y grabada Mona Lisa o Gioconda, que siempre impresiona por su sonrisa y, sobre todo, por su mirada, que o te ladeas mucho o parece que siempre te observa. Nunca decepciona. 

viernes, 24 de marzo de 2023

París: entre protestas, recuerdos y novedades (II)

Se trata de adentrarme en la calle de la Huchette (de la que sale la más estrecha de la ciudad, la del Gato que pesca), pasar por sus locales de kebap (aquí más conocidos como restaurantes griegos) y pedir un gyros baguette o sandwich.


Te rellenan el pan con lechuga, tomate, salsa de yogur, carne de pollo o cordero, lo envuelven en papel y luego -y aquí llega la gran diferencia- coronan el bocadillo con un buen puñado de patatas fritas sobre él para cuya ingesta te dan un tenedor de madera que sirve de ayuda. Lo devoro sentado en un lateral de la fuente de Saint Michel, ya que apenas observamos bancos urbanos. Delicioso. El recuerdo no se ha enturbiado.

La catedral de Nôtre-Dame sigue cerrada por obras y con su exterior afeado por las grúas. Nos dirigimos, por tanto, hacia nuestro siguiente objetivo, ubicado en Boulogne, al final de las líneas 9 o 10, ya que con ambas se puede acceder. Consiste en el famoso estadio del Parque de los Príncipes, en el que juega sus encuentros y encumbra su negocio el Paris Saint-Germain.

miércoles, 22 de marzo de 2023

París: entre protestas, recuerdos y novedades (I)

Siento como si volviera a quedar con una añorada amiga de juventud cuando subo al vuelo de Air France en dirección al aeropuerto de París Charles de Gaulle. Hace más de 20 años que no visito una ciudad a la que durante una década, ya fuera por trabajo o por placer, me desplazaba para pasearla prácticamente cada año. Y siempre me faltaba tiempo y me sobraban ganas de continuar.

Acostumbrado a las compañías de bajo coste, la amabilidad, la bebida y el aperitivo en el vuelo me deslumbran. Por aquellos tiempos en los que visitaba Paris formaban parte de la rutina de los trayectos.

 Y envuelto en esa nebulosa de recuerdos y sensaciones  aterrizo, me subo en el autobús para trasladarme de la terminal 2G a la 2F, donde me zambullo en el tren RER B y me lanzo al corazón de la capital francesa justo en época de protestas y revueltas por el incremento de la edad de jubilación.

Parada en Chatelet para hacer trasbordo de tren a metro, a la línea 14, hasta Porte de Clichy, en las cercanías del hotel en el que nos alojamos. Estamos el tiempo indispensable para registrarnos y dejar las maletas.



La panorámica del Sena con la torre Eiffel no puede esperar más, aunque las obras en el metro que nos impiden bajar en Invalides y nos alejan unas cuantas paradas retrasan el momento, como también lo hace la exhibición equina que llena de casetas y desluce la explanada de Campos de Marte.

lunes, 13 de marzo de 2023

¿Cómo están los hornos artesanos? (Á punt)

Mi última participación en Cadena de Valor, el programa que emite Á punt radio sobre economía social, la hemos centrado en el horno artesano, las dificultades que tiene para seguir adelante y su importancia en el comercio de barrio



Puedes escuchar el programa completo (emitido el viernes 10 de 19,30 a 20 horas) pinchando este enlace

jueves, 2 de marzo de 2023

viernes, 3 de febrero de 2023

Huertos urbanos (À punt)

 Hablamos sobre huertos urbanos y su expansión en diferentes zonas, sobre todo nuevas, de ciudades de la Comunidad Valenciana. Lo hacemos en el programa Cadena de Valor, que se emite en À punt radio.


Puedes escuchar el programa pinchando este enlace

lunes, 30 de enero de 2023

Sardina de bota sobre ensaladilla rusa (SQV)

La sardina de bota (esa que se expone a decenas aprisionadas sobre una especie de boca de tonel) se alza como el protagonista de la nueva tapa invernal, la que corresponde a este periodo del año dentro del ciclo gastronómico ´Las 4 estaciones de la terreta´. No se trata de una sardina entera, sino de un lomo desprovisto de espinas (el proceso de bota ya ayuda), que se saborea sobre una base de ensaladilla rusa.



 Esta última mezcla productos que se cosechan en la huerta valenciana y que son vendidos en la parte inferior, la de las tiendas, del céntrico Mercado de Colón, en la ciudad de Valencia.

Patata, zanahoria, judía verde y pepinillo configuran una suave ensaladilla rusa que se asienta sobre una rosquilla de esas que no se rompen en decenas de pedazos cuando se las muerde. También carece de añadidos como semillas, anís o cacahuetes. Se trata de una rosquilla que se doblega con firmeza ante el triturado de incisivos o caninos.

De este modo se presenta y conforma la tapa de invierno presentada por el restaurante Mi Cub, que dirige Anabel Navas y se ubica en el citado Mercado de Colón. Cada estación muestra un artículo novedoso y lo ofrece a su clientela durante esos meses. Atrás quedaron las albóndigas con queso azul y calabaza correspondientes al periodo otoñal.

 

Esa presentación la lleva a cabo en un acto en el que el experto que la ha ingeniado explica cómo ha llegado a esa resolución culinaria. En este caso se trataba de Toni Pérez, de Alma Marina, empresa alicantina especializada en salazones. “Reducimos el tradicional proceso de bota (anchoización) con una concentración de salmuera específica para, en pocos días, conseguir un producto de textura japonizada y el sabor a bota de toda la vida”, apuntaba, para recodar la tradición e historia con la que cuenta la sardina en la dieta mediterránea.

 

Pérez se decantó por esta tapa tras marinar la ensaladilla con su estilo de hacer sardina de bota y comprobar “la textura espectacular”, según su propia definición, que ofrece al paladar.


Artículo que me publica www.soloqueremosviajar.com.


Puedes leerlo en esa web de viajes y gastronomía pinchando este enlace

 

miércoles, 25 de enero de 2023

Celebración patrón periodistas

Un grupo de periodistas valencianos nos reunimos ayer en el Consejo Regulador de la DO Vinos de Valencia para celebrar San Francisco de Sales, patrón de la profesión.


En las intervenciones, hubo alguna sorpresa.




Y este fue mi discurso sobre la jornada:


Hoy el es el día del patrón de periodistas, de san francisco de sales.

Hoy es el día para quitarnos esa capa de autocrítica que siempre nos acompaña y que riega nuestras conversaciones. Está bien un poco, quizás un grado medio…pero tanta, cuando realmente nos gusta lo que hacemos y nos dedicamos a esto, suena a masoquismo. Y, personalmente, no me considero masoca.

 

miércoles, 18 de enero de 2023

El precio disparado de la vivienda (Cadena de Valor-Á punt)

 Sobre el precio disparado de la vivienda en las ciudades turísticas y la situación social que provoca hemos hablado en mi última participación en Cadena de Valor, el programa de economía social de À punt radio que dirige Pere Ferrer.


Puedes escuchar el programa pinchando este enlace



viernes, 13 de enero de 2023

Edimburgo (y III): castillo, Dean Village y el curioso bocadillo

 Día gris, aunque alcanzaremos los diez grados, todo un hito en esta época invernal. Inicio la jornada con paseo hacia Princess street desde la iglesia donde se casó Agatha Chirstie al ostentoso monumento en homenaje a Walter Scott, el prolífico autor de múltiples novelas de aventuras. Así veo amanecer, una circunstancia que aquí se produce del todo alrededor de -como no deja de sorprenderme- las nueve de la mañana.



Nos acercamos al castillo de Edimburgo, el famoso, a entrar. Cuesta 18 euros para adultos si compras el billete en la web y 21 si lo haces directamente en taquilla. En cualquier caso, como hay bastante gente decidimos desplazarnos primero a Dean Village, un espacio de casas antiguas de la ciudad, y, sobre todo, que transmite la paz que le confiere el río Leith a su paso acelerado por una caída de agua que después se apacigua.

Da para hacerse unas fotos en este espacio pintoresco y para salir unos minutos del bullicio. Desde ahí iniciamos un paseo por el lateral del río que nos lleva a la ciudad nueva para, más adelante, enderezar de nuevo hacia Princess street.

 

miércoles, 11 de enero de 2023

Edimburgo (II): Stirling, fantasmas y cervezas

 Amanece tarde en Escocia. Hoy nos ha salido un día frío aunque soleado. Lo primero ya hemos comprobado que resulta lo habitual; mientras que lo segundo es algo fuera de lo común que disfrutaremos. La variación de temperatura será entre -2 y +2, lo que aconseja utilizar las mallas que he traído en la maleta y vestirlas debajo del pantalón.



 

Castillo de Stirling

 

Hoy nos desplazamos a Stirling, una ciudad que destaca por su castillo y por algo más que luego contaremos. Vamos en tren desde la estación principal de Edimburgo: Waverley. Más o menos nos llevará una hora. Luego el revisor nos explicará que a los niños les hacen un precio especial si compras los billetes en la taquilla; el problema resulta que, quizás porque los días siguientes al primer de año está la mayoría de locales cerrado, las taquillas no se encuentran abiertas y no queda más remedio que adquirir billetes en las máquinas expendedoras, con lo que nos cuestan unas diez libras el trayecto por persona.

lunes, 9 de enero de 2023

Edimburgo (I): Nochevieja y entrada de año

 Aterrizamos en Edimburgo a las once de la noche (hora local) del 31 de diciembre. Bajar por las estrechas escaleras que habían adherido al avión de Ryanair para descender hasta la pista del aeropuerto bajo un aire polar no constituía la mejor bienvenida. En cambio, la simpatía de los agentes del control de pasaportes mejoró la entrada en Escocia.



Después, logramos localizar el autobús de la línea 100, el que traslada hasta la ciudad, cuando acababa de parar y mientras caían unos diminutos copos de nieve.

Eran ya las 23,30. Difícil tomar las uvas en el hotel. En ese autobús todos éramos españoles. Cada grupo viajaba por su lado; aunque a todos nos unió escuchar las 12 campanadas del cambio de año en Canarias (al fin y al cabo, coincide con el huso horario en Escocia) mientras ingeríamos la correspondiente decena de uvas (he de reconocer que una se me cayó al suelo con el movimiento del autobús). Después, todos, conocidos y desconocidos, nos deseamos feliz año.

 

domingo, 11 de diciembre de 2022

Doha: la capital de Qatar que ha concentrado un mundial de fútbol (y III)

Desde allí subimos a otro coche de Uber que nos lleva hasta la zona conocida como la Perla, el puerto de alto nivel de Doha. Nos deja entre un concesionario de Rolls Royce y otro de Ferrari. Comenzamos a pasear por la periferia del embarcadero, entre todo tipo de locales de lujo. Nos paramos en una cafetería porque me apetece tomar un té árabe, objetivo que no cumpliré hoy ya que, al igual que en el restaurante anterior, solamente nos ofrecen los típicos de consumo británico.

Nos sentamos y únicamente pedimos dos de los cuatro. El camarero nos dice que para permanecer en el lugar entre todos hemos de consumir un mínimo de cien riales (el equivalente a 25 euros). De lo contrario, tendremos que marcharnos, algo que terminamos haciendo.

Seguimos paseando hasta pedir un nuevo coche para desplazarnos. Tarda bastante en llegar debido al tráfico y, después, nos costará una hora, también por el mismo motivo, alcanzar nuestra base, en el lado contrario de esta megalópoli de dos millones de habitantes.

sábado, 10 de diciembre de 2022

Doha: la capital de Qatar que ha concentrado un mundial de fútbol (II)

 Amanece en Doha poco después de las cinco, aunque apuramos casi hasta las diez para levantarnos. Es viernes y, por tanto, festivo en países musulmanes. Después de tomarnos con tranquilidad la mañana, nos desplazamos, también con Uber, a la corniche, denominación que recibe el paseo marítimo. No está tan abarrotado como el zoco ayer, aunque hay aficionados de diversos países tomando fotos de la panorámica de rascacielos de fondo y, en primer plano, de carteles alusivos al mundial.



Nos comemos un swarma (como llaman por estos países a lo que en España conocemos más como kebap) en un espacio de mesas sobre uno de los escasos parques con la citada y preciosa panorámica de fondo y andamos hasta la estatua de la perla, que evoca el pasado de buscadores de perlas de los qataríes hasta descubrieron que su mayor riqueza no estaba en el mar, sino bajo tierra.

Nos trasladamos hasta una de las principales fan zone o espacio para aficionados, donde te piden la famosa y mundialista tarjeta Hayya, que es la que permite entrar en todos los recintos y en el propio país. Dentro hay numerosos juegos relacionados con fútbol, de meter la pelota por lugares inverosímiles o de afinar tu regate, además de, claro está, pantallas gigantes.

viernes, 9 de diciembre de 2022

Doha: la ciudad que ha concentrado un mundial de fútbol (I)


Aterrizamos en Doha, la capital y metrópoli de Qatar, a las 5,15 de la mañana, con 22 grados. Antes hemos hecho dos vuelos con Turkish Airlines Valencia-Estambul y Estambul-Doha, con una corta escala entre ambos, de esas que te hace dudar de si cogerás el siguiente avión, sobre todo cuando el primero ha salido con una hora de retraso. Cada vez me gustan menos los retrasos y la atención muy mejorable al cliente de la compañía turca.

En el aeropuerto internacional de Doha todo fluye con rapidez, tanto recogida de maletas como revisión de pasaporte. Siempre hay algún operario que te indica hacia dónde ir sin que te haga falta ni preguntarlo. Lo mismo sucede con la cola para recurrir al taxi, muy bien organizada y dirigida.

En unos 25 minutos, y por alrededor de 16 euros, nos plantamos en el alojamiento con la familia Roda, que nos cuida de maravilla. Cansados de la noche en vela, reposamos un largo rato, con el día ya más que amanecido.