Ninguno de los grandes partidos reivindica ya el voto centrista en la Comunidad Valenciana. Cada uno se ha acercado por diferentes caminos. El PSPV, por la presión desde la izquierda de los diferentes grupos de formaciones comunistas, de EU y de los nacionalistas de Compromís. Ese desplazamiento forzado, unido a ramalazos de política liberal, han empujado a los socialistas al supuesto centro.
El PP escogió hace décadas la senda de la incorporación de referentes (José Luis Olivas, Fernando Giner y un larguísimo etcétera) de la extinta Unión de Centro Democrático (UCD) y de su prolongación en el Centro Democrático y Social (CDS), partido que ha languidecido sumido en cuitas internas hasta su práctica desaparición bajo la presidencia nacional de Francisco Cabra.
Otras prioridades
Además, la precariedad económica que asola a cientos de miles de valencianos provoca que el único mensaje que les importe realmente es el que atiende su problema, el encaminado a crear empleo. La ideología queda relegada a un segundo o tercer plano. El debate de izquierdas, derechas o centro carece del sentido que sí tenía en anteriores comicios.
José Enrique Aguar y Amparo Picó iniciado la campaña de CDL |
En todo caso, el minoritario mensaje centrista atrae todavía a un reducido segmento de votantes. Preserva una clientela fiel que tratan de captar dos formaciones que llevan la ´c´ identificativa en sus siglas. Una, el Centro Demócrata Liberal (CDL), ha conseguido las firmas necesarias para concurrir por Valencia. Lo lidera un batiburrillo de ´ex´. Su cabeza de lista al Congreso, Amparo Picó, optó a presidir UV. Su número dos, Juan Fernández, apareció en 2007 en la candidatura del PP de Paterna y logró acta de edil. Mientras que su primer aspirante a senador, José Enrique Aguar, ejerció de alcalde de Benetússer y presidente del PSPV en Diputación.
Último fichaje CCD
La otra marca centrista, Ciudadanos de Centro Democrático (CCD), dirigida por el castellonense David García, no ha logrado las firmas en ninguna de las tres circunscripciones provinciales. Como contrapartida, ha dado un golpe de efecto fichando al último concejal en activo del finiquitado CDS, a David Fernández, elegido en el diminuto municipio toledano de Erustes.