La fértil iconografía romana representaba el mes de Julius
con un joven de bronceado torso y cabellos ornamentados con espigas. Estas
últimas también ejemplificaban la abundancia y a la propia divinidad de la
siembra, Ceres, la que instruía a los mortales en el arte de extraerle partido
a la tierra y de labrar el futuro.
Quizás inspirados en esa laboriosidad, las formaciones
políticas de la Comunidad Valenciana han decidido apurar el mes de julio para
pertrecharse de estrategias de cara al curso electoral que se avecina. Sobre
todo las que, sin representación actualmente en las cortes autonómicas, aspiran
a tenerla. Unión, Progreso y Democracia (UPyD), por ejemplo, ha inundado de
actos formativos y presentaciones este mes. La mayoría, de acceso limitado a
afiliados y simpatizantes.