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jueves, 29 de agosto de 2013

Por Asturias desde Cantabria previo paso por Soria (y III)


Mercado dominical de Cangas de Onís. Protagonismo de la venta de queso

Tercera etapa: Cangas de Onís, a seis kilómetros de la citada Arriondas por la carretera nacional. Aparcamos cerca del polideportivo porque este municipio de poco más de 8.000 habitantes es muy turístico y resulta bastante complicado liberarse del coche, a excepción de en los parkings públicos a dos euros todo el día. Lo primero, ir a la iglesia de la Santa Cruz, donde han conservado un dolmen con pinturas que no ha borrado el tiempo gracias a que estuvo enterrado hasta que una bomba durante la Guerra Civil lo desenterró. También obligatoria visita guiada por dos euros.

Te cuentan sobre todo cómo Favila, el hijo de Don Pelayo, erigió un templo sobre el dolmen. También el inicio de la Reconquista con el triunfo de Pelayo (mejor con el Don incluido). Vale la pena con creces la visita porque es muy difícil contemplar un túmulo megalítico tan bien conservado. La iglesia actual data del siglo pasado. También nos explican la pesca del primer ejemplar de salmón de la temporada (campanu), que este año se vendió tras subasta por 6.700 euros.

lunes, 26 de agosto de 2013

Por Asturias desde Cantabria previo paso por Soria (II)



Homenaje a la abuela asturiana, la de la rica fabada

 Y llegó el transito por la sinuosa carretera que conduce hasta Bárcena La Mayor para visitar este pintoresco pueblo. Obligado aparcar a unos cien metros antes de llegar, en un espacio público habilitado para ello. Interesante detenerse ante cada vivienda, con sus soportales y balcones de madera. Y de ahí a Asturias. Lo hicimos por Panes, población enumerada por el presentador Carlos Herrera en un artículo publicado en un suplemento dominical. Aunque lo buscamos, no hallamos el supuesto encanto.

Lugar de destino concreto: Arriondas, de donde parte la popular competición del descenso del río Sella (concluye en Ribadesella, a 17 kilómetros por carretera). Más en particular el hotel rural El Texu, que debe su nombre al tejo situado junto a él, con 400 años de antigüedad (desconozco si datada o estimada). Frente a él, los Picos de Europa. Alojamiento justito que merece la pena por la simpatía y trato de los dueños y por la panorámica.

miércoles, 21 de agosto de 2013

Por Asturias desde Cantabria previo paso por Soria (I)



El río Duero en su transcurrir por Vinuesa

El recorrido Soria-Cantabria-Asturias que aquí relato tiene la singularidad de que lo he hecho. Desconozco si resulta más recomendable o menos que otros muchos que pudieran diseñarse. En todo caso, al incluirlo en mi blog pretendo aportar sugerencias o ideas a quien decida visitar las poblaciones que enumero. Y la mejor manera de hacerlo consiste en haberlo atravesado previamente, en haber vivido la experiencia.


Un reducido rebaño de vacas nos recibió en Arenas
Comienza en Vinuesa, al inicio de la carretera Soria-Burgos, municipio marcado por la proximidad de la Laguna Negra. Tanto que se llena de visitantes atraídos por este paraje. Nos alojamos en el hotel Virginia. Muy discreta la relación calidad-precio. Seguro que los hay mejores. Comimos los típicos torreznos de cerdo. Vale la pena probarlos. Visitamos el mercadillo ambulante de sábado, pequeño y transitado. Interesante la zona por sus lagunas. Adecuada para senderismo. Por ejemplo, por la antigua calzada romana. El horno tradicional tiene su atractivo.

De ahí rumbo a Cantabria. Alojamiento en Los Lomas, en Arenas de Iguña. En este caso sí que sugiero este hotel rural por su precio (35 euros por habitación y noche), su entorno tranquilo, sus bizcochos para desayunar y la buena información que proporcionan sus propietarios. También la referencia que dan para cenar en el mesón, con raciones abundantes y precios irrisorios.

sábado, 3 de agosto de 2013

Escoger alcaldable (ABC)

La elección de un candidato que pueda ganar las elecciones de su localidad no resulta tarea fácil. De cara a los próximos comicios de 2015 la situación se complica por el desapego social hacia la política y por el desánimo de muchos alcaldes y portavoces. Han pasado de convertirse en los más solicitados para cualquier acto a coleccionar quejas, protestas y hasta insultos. Nada agradable.