Escaparate fallero

20 minutos CV. Pág. 2 (12-03-2014)

La fiesta fallera permite mostrar Valencia al mundo y, a la vez, que miles de valencianos exhiban sus productos, reivindicaciones o propuestas ante sus propios conciudadanos. Suponen un perfecto escaparate porque concentran a multitudes en espacios reducidos.

Cada mascletà proporciona una descomunal clientela potencial para vendedores de refrescos, de helados, repartidores de viseras o de globos. Por no hablar de los abarrotados balcones que desembocan en la plaza del Ayuntamiento y que múltiples empresas alquilan para reunir a sus invitados y agasajarles ante una barra repleta de bebida y comida. No olvidemos tampoco a quienes persiguen lanzar sus mensajes reivindicativos. Encuentran a decenas de miles de personas que, quieran o no, les oirán y puede que hasta escucharán.

Las Fallas hace años que superaron su mera faceta lúdica para convertirse en un gran expositor desde el que promocionar empresas o impulsar negocios. Un aspecto complementario al festero.

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Impacto fallero

La fiesta fallera reactiva la economía valenciana. El dinero, agazapado en bolsillos y cuentas el resto del año, corre como la pólvora. Tanto turistas como autóctonos gastan con alegría en hostelería, transporte, floristería, fotografía y un larguísimo etcétera de negocios y servicios. Pequeños empresarios propietarios de restaurantes o churrerías se animan a realizar los contratos que escatiman o les resulta imposible de ofrecer fuera de esta temporada.

20 minutos CV. Pág. 2 (13-03-2013)

En años precedentes Interagrupación de Fallas hablaba de un impacto económico, únicamente en la capital, cercano a los 800 millones de euros. Ahí suman desde el dispendio en construir el propio monumento a los supuestos ingresos que obtienen las decenas de espontáneos que ofrecen cerveza fría en cada mascletà. La fiesta genera, según el mismo colectivo fallero, más de 7.000 empleos temporales, la mayor parte declarada por hosteleros. Por tanto, en la actual coyuntura económica mejor olvidar los inconvenientes añadidos a estos festejos y dar la bienvenida a las Fallas 2013.

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Semana fallera (20 minutos)

¿Por qué las Fallas no se limitan a la semana fallera?


20 minutos. Pag. 2 07-03-2012



La tradición fallera permanece imperturbable. El hecho de que la Comunidad Valenciana alcance la tétrica cifra de 600.000 personas sin empleo no evita que ilusionados falleros de la comisión de turno llamen a los timbres de las casas de su barriada para recaudar la ´replegà´.

La longeva crisis tampoco impide que la ´mascletà´ de la plaza del Ayuntamiento comience testarudamente el 1 de marzo, que las casetas de buñuelos ocupen las esquinas desde el día 2 o que las carpas corten impunemente las calles para acoger festejos privados. Mientras, la feria del libro antiguo vuelve tras un año de exilio forzado por obras y desencuentros.



La vida continúa y la fiesta no para. El escritor Salman Ruhsdie afirmó que “todas las ideas, incluso las más sagradas, deben adaptarse a las nuevas realidades”. Los aforismos no constituyen verdades supremas. No obstante, incitan a reflexionar. A veces vale la pena un leve cambio en el presente que atenúe mayores en el futuro. Limitar la fiesta a su semana natal hubiera sido lo más lógico para reducir gastos y molestias.



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