20 minutos CV (05-10-2011) Página 2 |
Nuestros políticos se han lanzado a una vertiginosa carrera
por ver quién recorta más. Lo de menos es a cuántos convecinos perjudican. Han
olvidado ya el temor que les infundó el movimiento 15M. De aquella invitación a
reflexionar ha quedado bien poco. Ellos siguen en su línea, omnipotentes. Hasta
que dejen de serlo. Entonces soportarán su particular drama.
Hace unas semanas leía tres consejos básicos para alcanzar,
o como mínimo rondar, la felicidad. Bastaba con nunca compararse con otros
congéneres, sonreír con mucha asiduidad y granjearse amigos. Si nuestros
políticos se aplicaran
estas sugerencias su gestión cambiaría y, sobre todo,
nuestras vidas,
las de quienes les sufrimos, mejorarían.