Los partidos de tintes regionalistas andan emulando a Perseo. No han necesitado encontrar la residencia de las ninfas para obtener el casco de Hades, que otorgaba el don de la invisibilidad a quien lo llevaba puesto. Ni tan siquiera las sandalias aladas de Hermes, otra divinidad de la mitología griega, para desaparecer de la circulación.
En unos meses de convulsión social y recortes sin precedentes en la última década, han optado por sumirse en el abandono y rendirse al olvido. La última actualización de la web de la histórica Unio Valenciana consiste en un resumen de 2011. A pesar de haberse producido elecciones locales, autonómicas y nacionales durante ese año (a ninguna de ellas concurrió el partido que ahora preside José Manuel Miralles), para UV el único hecho relevante ha consistido en el acaparamiento de una dirección general de la Generalitat.
Por su parte, la filial digital de Coalicio Valenciana, elpalleter.com, ya ni alude a su partido matriz. Sí que vuelca artículos de opinión de sus dos máximos dirigentes, Juan García Sentandreu y José Manuel Vidagany. No obstante, en ambos casos firman como meros abogados. Un hecho similar ocurre con otra web vinculada a la palleteril, valenciafreedom.com, que, a pesar de arreciar el temporal económico y político, sigue anclada en sus críticas al catalanismo.
ABC. Edición Comunidad Valenciana 13-01-2012 |
Una tercera formación política del repertorio regionalista, y única de este elenco que compitió en los pasados comicios nacionales, Units per Valéncia, también induce a sospechar que ha recibido la visita de Medusa, el monstruo mitológico que convertía en piedra a los humanos que lo miraban. Su expositor en internet, su web, satura su portada con información de campaña electoral. Desde el 20-N no existe más vida.
Sobrecogidos
La sociedad anda sobrecogida e inmovilizada. Los partidos valencianistas mencionados constituyen una buena muestra. No obstante ni ellos ni otros con más pujanza y con responsabilidades de gobierno demuestran tener capacidad de reacción ante una situación económica que les supera. Una resucitada Medusa parece haber petrificado cualquier propuesta que no sea recortar salarios y subir impuestos.