La evolución del atleta popular al runner tecnológico. Reportaje en el Anuario del Cambio de 20 minutos

Pincha este enlace para leer el reportaje en la edición digital del diario 20 minutos 

Buhoneros (20minutos)

20 minutos CV. Página 2- 28-09-2011

El oficio de buhonero, que parecía haberse extinguido en la última mitad del siglo pasado, ha resurgido. Su figura, lejos de corresponder al prototipo de hombre español, de edad más o menos avanzada y cargado con un pesado y desgastado fardo, se ha metamorfoseado.

Ahora contemplamos a decenas de convecinos, de diversas nacionalidades, que hurgan en los contenedores callejeros y depositan aquello que seleccionan en un carro de supermercado hurtado o en la cesta implantada en su bicicleta. Escarban en vertederos a cualquier hora del día. A veces incluso generando una pequeña pero llamativa cola de colegas de oficio.

Son los buhoneros del presente, personas que buscan objetos que sus conciudadanos han desechado por supuestamente inservibles. Luego los revenden. Quizás alguno de los que los observa se sienta como el sabio del poema de Calderón de la Barca, que se lamentaba asegurando que no existía nadie más mísero que él. Hasta que se giró y se percató de que otro sabio recogía sus restos.

Este artículo lo puedes leer directamente en la edición impresa de 20minutos pinchando este enlace

Día sin coches (20 minutos)

Página 2 edición 20 minutos CV (14-09-2011)

Valencia secunda, desde hace algunos años, la testimonial iniciativa europea denominada Día Sin Coches. Esta intervención, que suele limitarse a prohibir la circulación en determinadas calles y a impulsar el uso del transporte público con regalos selectivos de billetes, pretende reducir la contaminación.

La actuación, por anodina y reiterada, pasa desapercibida para la mayoría de ciudadanos. Mucho más práctico resultaría rebajar el billete del autobús urbano, que cada año se encarece cinco céntimos, y del tren metropolitano. Tampoco estaría de más incrementar la red de carril bici y ahondar en la iniciativa denominada Valenbisi con vehículos a dos ruedas de mejor calidad. O aumentar frecuencias nocturnas de la aludida EMT y diurnas del metro.

Una vez aplicadas esas medidas ya tienen sentido acciones divulgativas, como la citada jornada sin coches que se celebra este mes de septiembre, o incluso coercitivas. Antes, no.

Mes de proyectos (20 minutos)



20 minutos Comunidad Valenciana. Pág 2 (07-09-2011)



Septiembre constituye un mes de proyectos, de iniciativas. La clásica depresión postvacacional se atenúa con los nuevos propósitos, con los vicios o defectos que queremos eliminar y con los retos que pretendemos acometer. Nos aportan una mezcla de ilusión y estrés.



En la milla de la solidaridad de Washington una placa en el suelo lanza la siguiente frase: “sabemos cómo conseguir casas para todos, tenemos los recursos; solo nos falta hacerlo”. La suscribe Millard Fuller, fundador de Habitat for Humanity International, una organización defensora de la construcción de moradas para los más necesitados y que, en la práctica, ha liderado el movimiento por una vivienda asequible en el catalogado como primer mundo.

Esta sentencia podemos aplicarla a muchas facetas de nuestra vida. Disponemos de la capacidad, de la predisposición, en muchos casos de la formación, para afrontar los proyectos que tenemos en mente. Nos queda dar el último y fundamental paso: empezarlos.

Sueldo o casa (20 minutos)

Página 2 edición 20 minutos CV 13-07-2011

“Trabajamos por casa, manutención y una pequeña cantidad de dinero para gastos”. El cartel que incluye esta frase, firmado por un matrimonio de 43-42 años y colgado con esparadrapo en la pared de una periférica calle de Valencia, refleja la magnitud de la situación a la que nos enfrentamos.

La cita aparece al final de una parrafada en la que los afectados explican que llevan dos años sin trabajo e indican que han sido desahuciados. Tras matizar la nacionalidad española de ambos cónyuges, se ofrecen para labores domésticas por un salario o, en su defecto, por algo tan elemental como un hogar. Como en siglos pasados.

Su drama, sufrido cada vez por más familias, hace que me venga a la mente una de las frases más emblemáticas con las que abandera ACNUR campañas de apoyo a los refugiados: “Encontrar una casa es duro; pero mucho más duro resulta perderla”. De banqueros y políticos depende, en gran medida, atenuar esta tragedia.

Promesas incumplidas (20 minutos)

¿Por qué nos acostumbramos a escuchar, o incluso a proferir, promesas que sabemos que no van a cumplirse? Me hacía esta pregunta mientras leía una especie de catálogo de falsos compromisos. Entre los seis más usuales destacaban los clásicos del sanitario al paciente diciéndole, antes de pincharle, que no iba a sufrir dolor, o la manida frase del fontanero de “volveré mañana”.

También me topaba con otros habituales como la sentenciosa “te querré siempre” o “mañana a primera hora te devolveré el dinero que me has prestado”, además del socorrido “no lo contaré, confía en mí” tras escuchar la revelación de un secreto.

20 minutos Comunidad Valenciana. Página 2

Todo ello me recordaba la sorpresa de un oriundo de India acabado de aterrizar en un campus estudiantil de EEUU. Entabló una corta conversación con un compañero que le despidió con un “te llamo mañana”. Pronto comprendió que solo se trataba de un modo recurrente de sustituir el “hasta luego”.

Trabajar por dinero (20 minutos)

“Llegada una edad todo el mundo trabaja por dinero”. Me soltó la frase con la fe de un clarividente. Le insistí en la aspiración a un empleo remunerado que a la vez comporte una satisfacción personal. Que no se trata siempre de hacer cualquier tarea sólo por conseguir unos ingresos, vamos. Pero no le hice capitular lo más mínimo.

Insistió en su teoría. “Cuando desarrollas un trabajo únicamente importa el dinero que ganas. El resto resulta indiferente”, lanzó con su clásico escepticismo existencial. Recapacité sobre estas afirmaciones mientras le miraba. En su caso, realmente se dedica a una labor profesional que no le agrada y que, encima, le succiona todo el día.

El mercado laboral aprieta y conseguir un empleo, guste o no, ya supone todo un logro. Pero de ahí a renunciar a trabajar por algo más que solo por dinero existe un trecho. Incluso mi buen amigo tiene el sueño admitido y planificado –aunque parezca una contradicción en su caso- de cambiar de trabajo. No perdamos la ilusión. Aunque nos parezca idealismo o utopía.

Para ver el artículo publicado ayer en la edición escrita de 20 minutos en la Comunidad Valenciana pincha en estas palabras y busca la página 5

Foto tomada de quienescornelio.blogspot.com