Reivindicar en favor del periodismo valenciano. ¿Más vale tarde...? Quizás ya es demasiado tarde

La Unió despierta ahora a la crisis del periodismo

Visita a Sot de Chera

Una bucólica imagen de Sot de Chera, en la Serranía valenciana. Torreón en rehabilitacion al fondo y riachuelo para bañarse en primera linea. Los algarrobos y olivos completan el paisaje rural. El agua, nítida para contemplar las carpas pululando. Eso sí, lo que se ve es lo que hay. El pueblo da de sí lo que da.

La crisis no deja de apretar

Comida pagada al céntimo

Mis batallitas columnistas

Los usos de la tarjeta Visa

Benedetti nos permitió apreciar el vibrante sonido de las palabras bien escogidas

El recitar de una vida de poeta

Una encuesta que delata a los que más se 'escaquean'

¿Trabajan los eurodiputados? Parece que no tanto como deberían

Vale la pena escuchar esta versión de Viva la vida

Viva la vida en versión percusión

La región francesa de Champagne y uno de sus pueblos más entrañables: Parfondeval

Lo que hacen las cañas...

Es curioso los personajes con los que los valencianos nos iríamos de cañas. Los políticos son los favoritos

Columna opinativa

¿Cuántas perspectivas tiene la realidad? Supongo que las de cada persona...

Por si alguien se había quedado con ganas de más ´Señor de los anillos'...

El personaje de Gollum no deja de tener sus seguidores

Para qué ofuscarse?

Qué difícil parece no ofuscarse con tantos problemas que surgen en la vida! Pero, si lo piensas fríamente, para qué sirve esa ofuscación. En la práctica, para nada. Para crearte más desazón, para hacer que no puedas afrontar con claridad la situación y, sobre todo, para atascarte en esa dificultad.

Se trata de limpiar la mente y de no repetirse una y otra vez un error o un hecho angustioso. De reflexionar, vale, ha ocurrido, pero ya no puedo hacer nada para volver al pasado. Sólo puedo intentar no repetir errores en el futuro o pensar en circunstancias más agradables que me hagan reconducir la vida con cierto optimismo.

Si nos ofuscamos con hechos o con personas únicamente conseguimos hacernos daño, nos carcomemos internamente y no avanzamos. Cuesta, pero no queda más remedio que pasar el limpiacristales por nuestra mente, dejarla limpia de heridas y manchas y mirar con más nitidez el camino que afrontamos. Porque debemos seguir adelante.