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| Bernard Ollivier (imagen tomada de maximepetit.over-blog.com) |
Jubilado y caminante empedernido. El francés Bernard
Ollivier ha recorrido a pie, en etapas de entre cuatro y seis meses durante
cuatro años seguidos, la antigua ruta de la seda. El reto no resulta baladí, ya
que implica transitar, durante una media de 35 kilómetros diarios, por terrenos
abruptos. Su única compañía consiste en un carrito que carga sus bidones de
agua.
Relata su peripecia en tres libros. El primero de ellos ha sido traducido al castellano como ´A pie por la ruta de la seda´, una versión algo subjetiva del francés ´Longue Marche´.
A sus 67 años no ha buscado una redención ni un fulgor espiritual. Se ha limitado a poner a prueba su fortaleza física y mental, a afrontar una soledad introspectiva. Numerosos personajes con los que se topa le ofrecen trasladarlo en sus vehículos. Rechaza todas las propuestas ante los internacionales gestos de incomprensión de sus interlocutores. Y consigue su objetivo. Su ejemplo demuestra que el paso de los años no implica sepultar las ilusiones. Que la fuerza de voluntad logra superar las trabas propias y ajenas.
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| 20 minutos Comunidad Valenciana (01-06-2011) |
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