El avance del tórrido mes de julio no arredra a aquellos
partidos que saben que, si quieren presentar batalla electoral en 2015 con opciones
reales, el tiempo se les escapa de las manos. No dejan de organizar actos y de
designar cargos. Entre los que más se afanan destaca Ciudadanos, que ya tiene
líder, aunque sea provisional, en la Comunidad Valenciana. El ilicitano Emilio
Argüelles, exPP, ha recibido el nombramiento de delegado territorial, mientras
la estructura configura su gestora en la capital autonómica.
Tras adquirir nociones de comunicación y oratoria el pasado
sábado 19 en el Campus de Jóvenes celebrado en Valencia, líderes locales como
Toni Subiela, en Burjassot, andan lanzados a la implantación municipal. Al
igual que Juan Miguel Cebrián en Requena. El objetivo de la formación, entre
cuyos baluartes destaca José Enrique Aguar, concejal de Benetússer, consiste en
tejer una extensa madeja de agrupaciones locales. Alboraya o Alfafar ya se han
sumado a esa lista. Pretende que las poblaciones aporten el impulso de votos
para que Ciudadanos entre en las próximas cortes autonómicas. Una perspectiva enteramente
opuesta a la de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), más centrada en las
grandes ciudades.
Podemos no anda, ni mucho menos, a la zaga del partido de
Albert Rivera. Por cierto, sin duda suscribiría el axioma proferido por el
líder catalán: “nuestros votantes son gente de todas las clases sociales”. Como
mínimo en sus círculos así se aprecia. También el pasado fin de semana Podemos
desarrolló un nuevo encuentro en el cauce seco del Túria, en Valencia, para
incidir en la configuración de sus comisiones de trabajo. Promover su presencia
en redes sociales y buscar talentosos e implicados intelectuales se han
convertido en dos prioridades. Reclutan militantes activos. Como los del
círculo de Patraix, que salen a reunión multitudinaria por semana.
Y ya alejado de sus ambiciosos objetivos de la Convención
Valencianista 2012, su simiente, Poble, ha divulgado sus cuentas. Hasta el
presente mes de julio, el partido de Agustí Zacarés ha ingresado 9.592 euros y
gastado 5.884. De estos últimos, 2.999 los ha invertido en mercadotecnia y
publicidad. Visión, en ese aspecto, no le falta. Otra cuestión consiste en que
su predicamento vaya languideciendo. Quizás la aparición de Full Volant, medio
digital en valenciano, atenúe esa caída.
Como también puede perder fuelle el proyecto de Demòcrates
Valencians. Ha retrasado su asamblea constituyente al 20 de septiembre en lugar
de haberla celebrado este mes de julio, como estaba previsto. Quizás así dilate
algunas críticas internas –el sempiterno cainismo vuelve a emerger-. No
obstante, también debilita al impulso que había adquirido. Ese error no lo
cometen ni Ciudadanos ni Podemos.
Columna publicada en el diario ABC
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