El Partido Socialista en la Comunidad Valenciana afronta
días decisivos para su futuro y, sobre todo, para su reconstrucción. Una vez
asentados el poder orgánico y la jerarquía institucional de su líder autonómico
y presidente de la Generalitat, Ximo
Puig, este fin de semana comienzan a dilucidarse los congresos provinciales
y, sobre todo, el de Joves Socialistes.
Sí, aludo principalmente al de la cantera del PSPV porque el
peso de la formación de Pedro Sánchez en el ámbito valenciano no recae precisamente
en la estructura provincial. Más bien ha resultado testimonial hasta la fecha.
Incluso con José Luis Ábalos de
máximo responsable en Valencia. En su dilatado currículum político, encumbrado
últimamente como secretario de organización nacional, apenas constarán unas
palabras de su mandato provincial.
Con Mercedes
Caballero como previsible secretaria general en Valencia, José Luis Cholvi como seguro en
Alicante y con un cuarteto de candidatos que dejan todo muy abierto en
Castellón, habrá una renovación profunda, desde luego. No obstante, en los
entresijos y foros de decisión socialistas seguirá siendo, salvo cambios en los
próximos años, simbólica. En principio, ninguno adquirirá el ribete de ´barón´o
´baronesa´.