La inminencia de la Volta a Peu ha disparado la presencia de corredores en las calles de Valencia. La prueba, que tendrá lugar el próximo domingo 19 de mayo, constituye todo un acicate, un estímulo, para incentivar el deporte popular. Miles de personas que han permanecido en hibernación deportiva durante meses o incluso años se calzan sus deportivas, se ponen su camiseta de tirantes y se lanzan a la calle.
Para muchos valencianos supone el objetivo deportivo anual. La inspiración primaveral y el alargamiento y la calidez del día animan a practicar deporte. La masificación de la cita le quita o le atribuye encanto, según la opinión de cada cual. Pero el hecho cierto consiste en que, para bastantes de quienes participan, supone el inicio de una fructífera trayectoria deportiva.
El siguiente paso lo constituyen los grandes fondos, de 15 kilómetros. Y seis meses después, con perseverancia y fuerza de voluntad, disponen de la potencia para afrontar un medio maratón: 21 kilómetros. Año o año y medio más tarde, cuando la fiebre deportiva actúe con mayor virulencia, su mente andará centrada ya en la prueba sublime, en el mismísimo maratón, en recorrer 42.195 metros. Y lo conseguirán. Y lo disfrutarán.
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