Animales y alimentos en Burjassot

 Dos noticias que apenas han tenido la relevancia de breves en diarios en papel o de una discreta posición interior en medios digitales me han llamado la atención en los últimos días. Ambas atañen al mismo municipio, y en los dos casos el Ayuntamiento de Burjassot, y más en concreto su equipo de gobierno, constituye la fuente de información.

La primera consiste en la prohibición de instalarse en su término municipal a circos que tengan animales en cautividad. Ya digo que la noticia llama la atención por su singularidad. Desde luego, si la aplicara la inmensa mayoría de municipios evitaríamos que nuestros hijos se acostumbraran al lamentable espectáculo de contemplar cómo tigres adormilados se introducen en aros llameantes azuzados por latigazos. O cómo tristes elefantes afrontan su última etapa vital atrapados en un habitáculo en el que apenas pueden alargar su trompa. 

Jordi Sebastià, alcalde Burjassot

Sí, nos hemos acostumbrado a presenciar este tipo de circunstancias como si fueran lógicas y razonables. No obstante, ni tienen lo uno ni lo otro y, desde luego, carecen del mínimo espíritu de cuidado del animal capturado para el espectáculo. La tradición nos adormila.

Y ya paso a comentar la segunda noticia. El Ayuntamiento ha anticipado que creará un banco de alimentos para repartirlos entre sus conciudadanos. La iniciativa privada tiene el práctico monopolio de este tipo de proyectos. No obstante, en una situación como la actual cuantas más fuentes de ayuda y proveedores existan para el vecino –en este caso solo de Burjassot- asolado por la actual coyuntura, mejor. De eso no cabe la más mínima duda. Siempre, desde luego, que el anticipado banco de alimentos quede bien gestionado y organizado.

Por tanto, mi felicitación al Consistorio de esta población de l´Horta Sud por ambas iniciativas que, posiblemente en otras circunstancias de menor vorágine informativa, hubieran tenido mayor repercusión en los medios de comunicación.

Columna publicada en diariocriticocv.com